Dos son los grandes motores que nos mueven en la vida: el amor y la esperanza. (Ángel Herrera Oria)
27 de abril de 2022
Hay cristianos a los que se les pide que den la vida; a nosotros se nos pide un poco de incomodidad… no es para tanto», señalaba con ironía el periodista, escritor e impulsor de las campañas recientes de la Asociación Católica de Propagandistas (ACdP) Jaume Vives durante su intervención en las XVI Jornadas Católicos y Vida Pública de Jerez de la Frontera: INCORRECCIÓN POLÍTICA Y DEFENSA DE LA VERDAD, organizadas por la ACdP, que se desarrollaron los días 25 y 26 de abril.
El autor del documental Guardianes de la fe protagonizó la primera mesa redonda del evento junto al estadounidense William Haag, militar y promotor en España de 40 Días por la Vida. Ambos reflexionaron sobre las implicaciones de defender la fe a pie de calle, algo cada vez más complicado en un tiempo que Vives consideró «un momento crítico». Destacó que este «no es momento de grandes victorias –aunque no hay que abandonar ninguna lucha–, sino de perder el miedo».
Lamentó que muchos cristianos viven «midiendo las palabras», y defendió que hoy es necesario «recuperar la libertad». Vives recordó que para perder el miedo «hay que asumir incomodidades, estar dispuesto a perder la reputación, incluso a morir en el intento», y puso como ejemplo a los cristianos de Irak, que lo perdieron todo por no renunciar a dar testimonio público de su fe en Jesucristo.
Haag, por su parte, explicó la labor de 40 Días por la Vida contra el «cáncer de la sociedad» que es el aborto. Citó las cifras de la iniciativa -64 países, más de un millón de voluntarios, más de 9.000 campañas realizadas y más de 20.000 niños salvados confirmados-, y consideró que su trabajo es «una obra de misericordia».
Destacó que rezar frente a los abortorios es «cristianismo elegante», y que ni juzgan, ni molestan, ni tienen miedo. Añadió que a las oraciones se suma la ayuda a las familias, tanto a las personas que han optado por seguir con el embarazo como las mujeres que han abortado, y destacó el ejemplo de Jesucristo y de los santos, «los personajes más políticamente incorrectos de la historia».
En la mesa redonda, moderada por el delegado de Pastoral Familiar y Defensa de la Vida en la diócesis de Asidonia-Jerez, Miguel Ángel Martínez, también se abordó en detalle la primera acción de la campaña Cancelados. En enero, la ACdP instaló 250 marquesinas en 33 ciudades españolas con el mensaje «Rezar frente a una clínica abortista está genial», y fue retirada en un tercio de las localidades. «Para nosotros fue una juerga, y veo como un milagro que el abogado de las clínicas abortistas acabase reconociendo que la oración funciona, que les estropea el negocio», comentó Vives.