24 de diciembre. EL NIÑO JESÚS
Es el auténtico Guía, el Salvador y el encargado de transmitir el mensaje de Dios al mundo. Representa la sencillez y la humildad. El Niño Jesús es el Dios que se hace hombre, el guía espiritual que está en el corazón.
Desde las Sagradas Escrituras, Dios nos recuerda que debemos transformar nuestros corazones para ser parecidos a Jesús, al reconocer nuestra pequeñez y depender de la ayuda divina como niños.
“Yo os aseguro: si no cambiáis y os hacéis como los niños, no entraréis en el Reino de los Cielos” (Mateo 18:3).
En el Evangelio de Juan, Cristo también invita a que confiemos en Él. “Y todo lo que pidáis en mi nombre, yo lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo”, (Juan 14:13).
El Niño Jesús viene a decirnos que tenemos que confiar en la voluntad divina y pedirle a Dios como niños pues sólo así podrá guiarnos hacia su Reino.
